Volver

Saludo Martes 28 de Abril

Queridos profesores y familias:

 

Si hace poco les hablaba de la fortaleza como la virtud que nos impulsa a superar las dificultades, especialmente el miedo a la muerte, a fin de conseguir el bien amado, hoy quiero invitarles a pensar en la templanza como aquella virtud que nos hace apartarnos de los placeres que nos dificultan del bien de la razón.

 

Por eso es importante tener criterio para que nuestro obrar de estos días al mismo tiempo que por la fortaleza supera las dificultades, por la templanza se aparta de las comodidades que impiden el obrar virtuoso.

 

Estas comodidades, o placeres que nos desordenan y van dificultando el obrar bueno, son por ejemplo dejarse estar en la cama sin levantarse para afrontar el día,  estar todo el día en pijama, no cuidar la dignidad de nuestra propia imagen, dedicarse a jugar “play” o ver series donde la actividad normal de las facultades del hombre se van anulando en la pasiva aparente comodidad que destempla al hombre, realizar las comidas de cada día como un mero acto animal, perdiendo la belleza espiritual de esas realidades y necesidades materiales.

 

Un hombre sin templanza fácilmente se dedicará solo a los placeres, apartando hasta de su misma consideración cualquier obra o propósito que sea dificultoso, incómodo o árido…porque es más importante el placer inmediato que el posible gozo futuro de lo difícil. Si aplicamos esto al estudio se entiende por ejemplo la insistencia clásica de cierta austeridad en las condiciones de vida del estudiante, para que haciéndole más lejano el deleite de las cosas inmediatamente placenteras pueda ir descubriendo el gozo más profundo de lo que se presenta como dificultoso y futuro.

 

Por tanto, pidamos al Señor nos ayude a vivir en esta templanza, que es recto orden de uno mismo que aquieta el espíritu en los gozos más verdaderos, como dice el Salmo 27: “una cosa he pedido al Señor (…) contemplar la hermosura de su rostro.”

 

Un abrazo a todos y que Dios les bendiga y la Virgen les proteja.

 

Padre Javier Jaurrieta G.

HNSSC

Publicaciones Anteriores